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ERC > REPORTAJE |
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ERC va a Europa por Cataluña |
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PAULO FERNANDES |
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Las principales propuestas de ERC para Europa tienen que ver con el reconocimiento a “naciones sin estado” en el seno de la UE. Los republicanos tratan de añadir más partidos a la coalición “Europa de los Pueblos”; para aumentar las posibilidades de sacar al menos un eurodiputado en las elecciones de junio próximo.
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| EN LA SEDE DE ERC EN BARCELONA (Cécile Carrez) |
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Dentro de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) lo ven difícil. Es incierta la posibilidad de repetir en junio el único escaño obtenido hace cinco años en las últimas elecciones europeas. Mucho dependerá de cómo se montan las alianzas, sobre todo ahora que España tendrá cuatro diputados menos en el Parlamento Europeo (pasa de 54 a 50 escaños). Aunque desde la dirección del partido digan que las posibilidades están todas abiertas, hoy por hoy lo más probable es repetir la coalición “Europa de los Pueblos”, que reúne a partidos nacionalistas periféricos de España como Eusko Alkartasuna (EA), Chunta Aragonesista (CHA) o el Partido Socialista de Andalucía (PSA).
“Tenemos una necesidad pragmática de ampliar la coalición. Porque si no, no sacaremos un eurodiputado”, calcula Marta Rovira, secretaria de Política Internacional de ERC. El fichaje “estrella” de esta ampliación sería el partido que más creció proporcionalmente en las elecciones al parlamento vasco en febrero, los nacionalistas moderados de Aralar. Otra opción es Izquierda Unida (IU).
La alianza ideal deseada por ERC de cara a las europeas sería en primer lugar una gran coalición de las coaliciones, “que pudiera unir a todos los partidos que quisieran luchar contra un bipartidismo en España”, cuenta Rovira. O, por lo menos, una coalición que reuniera a todos los partidos catalanes.
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Pero las dos propuestas parecen no seducir a grupos como CiU y el PNV.
Candidatos independientes
El hecho de sacar a lucir un cabeza de lista considerado “independiente” (Oriol Junqueras no es oficialmente militante de ERC) puede corresponder a una búsqueda por el elector renitente. La abstención de los votantes en las últimas europeas (sólo un 45% de participación electoral en España, 39,8% en Cataluña) es un problema a zanjar.
“En un momento de desafección política es muy importante que la sociedad civil vea que una persona que sale de esta misma sociedad civil se comprometa políticamente”, aclara Marta Rovira refriéndose a la elección de Junqueras.
El mismo raciocinio parece haber ocurrido a los de CiU, cuyo candidato Ramon Tremosa tampoco pertenece oficialmente a las filas convergentes; y podría atraer al “voto soberanista”. Es de notarse que ninguna de las dos grandes fuerzas nacionalistas catalanas repite cabezas de lista respecto al 2004.
Sin el acuerdo pan-catalanista, los republicanos tratan de ganarse puntos en relación a CiU. En su propaganda, ERC vende a su candidato como un independentista que “no es de salón” – una provocación al convergente Tremosa. Aunque no abandonen la posibilidad de actuar juntos en el Parlamento Europeo después de las elecciones.
Los ejes
ERC va a Europa por Cataluña. Entre los ejes del programa anunciados por el partido, el primer punto es “conseguir una Europa que respete y defienda la diversidad cultural y lingüística nacional”. Los republicanos creen que Cataluña no está representada en Europa. “Si la UE se sigue construyendo con base [apenas] en los Estados, seguiremos diciendo que ‘no’.”, asegura Marta Rovira, la secretaria de Política Internacional. ERC fue en su día por el “no” a la constitución Europea.
El segundo punto del programa europeo de ERC es por una UE más transparente y democrática. El tercero, una Europa más social y sustentable. El cuarto, una Europa con personalidad jurídica propia.
Hace cinco años, la coalición “Europa de los Pueblos”, de la que participaba ERC, obtuvo cerca de 380.000 votos en toda España (2,49% del total) en las elecciones europeas. Lo que le valió uno de los 54 escaños españoles en el Europarlamento. El mandato fue dividido entre las dos principales legendas del grupo. El representante de ERC, Bernat Joan, ocupó el escaño durante los tres primeros años. Mikel Irujo, de Eusko Alkartasuna (EA), asumió el puesto en julio de 2007.
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