En 2008 la componían 48.318 afiliados. A pesar de ser la tercera fuerza en votos del país, quedaron en sexto lugar por número de escaños, sin posibilidad de formar grupo parlamentario propio. La bipolarización política existente entre PP y PSOE a nivel nacional se encuentra entre sus principales puntos de lucha.

Según el propio partido, los medios de comunicación y el actual sistema electoral, regido por el sistema D’Hondt, les perjudica. Por su parte, los medios de comunicación fomentan la concentración de los votos entre los dos grandes partidos y condicionan al votante, ya que solamente difunden y dedican “minutos” en su agenda informativa a las propuestas electorales de estos dos y no hablan de otros partidos más minoritarios como es el caso de IU. Además, desde IU critican el actual sistema de reparto de votos, calificándolo de “injusto”, y tachándolo de “no representativo y poco realista”.

Entre los principales cambios sufridos por el partido en los últimos meses, sin duda el más significativo ha sido la dimisión de su coordinador general, Gaspar Llamazares, tras los malos resultados obtenidos por Izquierda Unida en las elecciones generales de marzo de 2008, en los que IU perdió tres de los cinco diputados que tenía, lo que se traduce como su peor resultado electoral. Llamazares se hizo cargo de la dirección del partido en el año 2000, abogando por un acercamiento ideológico al Partido Socialista; precisamente, ése puede haber sido uno de los motivos por los que IU perdió fuerza política en los últimos comicios y por lo que, en diciembre de 2008, Cayo Lara era nombrado nuevo líder del partido, con ideas claramente alejadas de su antecesor y que recuerdan al discurso de Julio Anguita.

De cara a las elecciones europeas del mes de junio, el Consejo Político de Izquierda Unida ha presentado como cabeza de lista al eurodiputado Willy Meyer. La presidencia ha valorado el trabajo de Meyer como eurodiputado en los últimos cinco años. A ello hay que sumar su trabajo y participación en las comisiones parlamentarias de Asuntos Exteriores y en la Delegación para las Relaciones con los países de América Central, entre otros. El número dos de las lista para las europeas será el catalán Raül Romeva i Rueda, candidato por IC-EV-EUiA (Iniciativa per Catalunya - El Verds - Esquerra Unida i Alternativa).

La crisis se sitúa entre los puntos a destacar en el programa electoral de IU para las europeas. El pasado 16 de febrero, IU inició su precampaña con la presentación de la iniciativa “Crisis. Si hay alternativa”. En palabras de su secretario general, Cayo Lara, “ésta se trata de una campaña de apuesta y de protesta”. El Plan de Activación económica tendrá un coste de 62.000 millones de euros y pretende la creación de 1.900.000 nuevos puestos de trabajo, la disminución en los próximos tres años del paro y la dotación de 3.000 millones en 2009 para subvencionar los intereses de créditos a corto plazo que tengan que suscribir las pymes con problemas de liquidez, entre otros aspectos. “No se trata solamente de salvar los bancos, sino de que la gente pueda vivir, tener un trabajo, cobrar una pensión y ver sus derechos fundamental respetados”, asegura Raül Romeva.

En las últimas semanas IU ha mantenido diversos encuentros informales con responsables de otras formaciones políticas de izquierdas, entre ellas Iniciativa per Catalunya Verds o Izquierda Republicana, para estudiar posibles alianzas de cara a la consulta europea. Algunas quinielas apuntan la posibilidad de que sea Esquerra Republicana de Catalunya el partido que se una a IU para defender la presencia de los partidos de izquierdas en la Unión Europea. “Tenemos una doble expectativa: repetir escaño y contribuir en la medida en que podamos en las decisiones políticas europeas. Depende de los votantes, cuantos más representantes de izquierdas, mayor influencia”, dice Romeva.