PORTADA |Muebles |Efectos colaterales

Menos casas, menos muebles

La ventas en el sector caen en picado tras el crash de la construcción

EMMA CERDÀ | BERNAT TOMAS

En 2008 la burbuja inmobiliaria, motor de la economía española durante más de una década, se desplomó. Las consecuencias no tardaron en llegar: desempleo, caída del consumo y decrecimiento económico, es decir, la entrada de España en recesión.

Crónica: El Columpiu, ¡pasen y vean!
La venta de vivienda se ha estancado.

Los efectos colaterales de este desplome han sido muchos. Uno de ellos, el descenso de las ventas en el mercado de muebles en España. Cada casa nueva que ha dejado de construirse y de venderse, es una vivienda menos que amueblar. Además, se está poniendo freno a la renovación de los hogares ya habitados. La venta de muebles en 2008 cayó alrededor de un 20%  respecto al año anterior. La mayor caída tuvo lugar en Canarias, donde se ha registrado un descenso del 28%. Además, ha habido fuertes descensos en Barcelona (22%) y Madrid (21%).

La crisis supone un nuevo reto; renovarse va a ser el caballo de batalla del sector en 2009. La reparación de muebles viejos y el mobiliario urbano son dos mercados en los que el sector espera cobijarse para capear el temporal. Además, los empresarios contactan con decoradores, diseñadores y el mercado hotelero, como nuevos objetivos donde fijar sus expectativas de futuro.

Algunos están preparando ayudas para renovar los muebles, es decir, apoyar a personas que tienen su casa montada y que sólo quieren cambiar el modelo. Es el caso de la Asociación de Muebles de Ourense que incentivará las ventas y las ayudas al consumidor, especialmente a jóvenes. Pondrá a su disposición créditos blandos para la compra de muebles (que puedan ser desgravados en la declaración de la renta).

Las ideas no se acaban cuando hay que vender. En Valladolid una empresa de muebles ha duplicado su facturación en plena crisis: ofrecen piezas a un euro y se las quitan de las manos. Se hacen colas toda la noche, en medio del frío intenso. Solo en tiempos de crisis una buena promoción puede hacer que personas ansiosas esperen durante horas y horas para comprar. Sofás, recibidores, sillas de oficinas o somieres son algunos de los muebles que cada jueves se pueden comprar por un euro.

Los despidos masivos son una consecuencia más de esta crisis. Los 130 trabajadores de la empresa EMS, que fabrica los muebles para el grupo INDITEX (propietaria de Zara, Bershka y Massimo Tutti, entre otras marcas), se quedarán en la calle esta próxima primavera. Durante 32 años han montado el mobiliario de las tiendas por todo el mundo pero la crisis ha frenado la expansión de la multinacional, por lo que van a quedarse sin trabajo.

La disminución de ventas en España no se corresponde con la buena salud de la exportación de muebles al extranjero. Aunque no se superaron los resultados de 2007, la venta exterior en el último año se mantuvo. Francia, Reino Unido y Portugal siguen siendo los tres países importadores de mueble español más importantes, que compran sobre todo a Cataluña y la Comunidad Valenciana.

Otro tipo de mercado que se ha visto beneficiado es la venta de muebles de segunda mano. Inmigrantes, jóvenes estudiantes, parejas recién casadas y familias acuden a mercados y tiendas que ofrecen piezas usadas. Otros prefieren buscar por las calles de Barcelona. Cada noche se puede encontrar en ellas muebles que tiran muchas familias y cuyo destino es el reciclaje o la casa de alguien que no puede permitirse comprarlos.

Unos tiran y otros recogen. Este difícil momento obliga a agudizar el ingenio entre consumidores y empresarios, todos buscan alternativas a las que acogerse para responder a los efectos colaterales en tiempos de crisis

  ¿Quiénes somos?