Para desgracia de los asistentes al acto, el dirigente popular no llevaba falda escocesa blanquiazul, como había prometido si el Espanyol ganaba la final de la UEFA, celebrada la noche antes. Vestido con una sobria americana negra, una camisa color crema y pantalones oscuros, Fernández Díaz se mostró muy confiado del vuelco electoral. "Con vuestra confianza dentro de cuatro años viviremos en una ciudad mucho mejor. Barcelona es muy reconocida, pero aún puede y debe avanzar en muchos aspectos". Uno de los momentos más aplaudidos fue cuando el alcaldable se refirió al recién elegido presidente francés. "Nicolás Sarkozy acaba de enterrar el mayo del 68. Yo enterraré el tripartito del 79", dijo mientras recibía una ovación. "Igual que Sarkozy en Francia, sólo nosotros podemos arreglar los problemas de aquí", añadió.

Fernández Díaz prometió gobernar "para las personas de ley y que pagan sus impuestos, frente a la cultura de la impunidad legada por el tripartito".