El coste total de las infraestructuras realizadas del Forum
es de 340 millones de euros financiados en un 60% por capital
público. En las obras confluyen las medidas más
innovadoras en el ámbito de la arquitectura contemporánea.
El proyecto está compuesto de dos fases. El Centro
de Convenciones Internacional de Barcelona (CCIB) destaca
dentro de la primera. Se trata de un complejo formado por
dos construcciones: el Edificio Forum y el Centro de Convenciones.
La construcción más emblemática
del CCIB es el Edificio Forum. Ambos estarán conectados
subterráneamente. Se trata de un prisma con forma de
triángulo equilátero de 180x25 m2. Los vértices
coinciden con las tres calles que confluyen en el edificio:
la Diagonal, la Rambla Prim y la Ronda Litoral. El proyecto
es obra del equipo suizo Herzog & De Meuron. En su interior
se alojarán un auditorio y una sala de exposiciones.
El edificio tendrá un gran impacto visual ya que su
exterior está recubierto por una capa de agua que caerá
por la fachada y por las claraboyas abiertas en el techo.
Con este recurso se pretende “autorefrigerar”
el interior.
El conjunto se completa con el Centro de
Convenciones, obra del arquitecto José Luis Mateos.
Con casi 70.000 m2 y una capacidad para 15.000 personas, es
un edificio de forma rectangular compuesto por tres plantas
y un subterráneo. El impacto económico de esta
actividad en la ciudad alcanza hoy los 350 millones de euros.
Incrementar el número de congresos multiplicaría
el gasto que los visitantes hacen en hoteles, restaurantes,
y transportes. La agenda del nuevo centro de congresos que
entrará en funcionamiento en el 2005, se va llenando
y ya tiene reuniones contratadas para el año 2010. |
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Por el momento, las reservas ya ocupan más de la mitad
del año 2005 y hasta el 2010 hay confirmados más
de 100 actos con 130.000 asistentes. El exterior está
realizado con acabados de aluminio perforados que se ondulan
imitando las olas del mar.
En la construcción del área
Forum y de los dos edificios principales se ha hecho la apuesta
por el reciclaje de energía y autoabastecimiento. En
esta línea se sitúa el proyecto de recuperación
del Río Besós que implica la desmantelación
de las 54 torres de alta tensión y de los 56 Km. de
cables que surcan el tramo final del río. Se ha recurrido,
también, a la cobertura de la depuradora y al proceso
de regeneración de las aguas que permitirá la
recuperación del biotopo marino.
Siguiendo los criterios de “sostenibilidad
medioambiental” se prevé la creación de
un área litoral en terrenos ganados al mar para desarrollar
un nuevo puerto deportivo, con capacidad para mil amarres,
un zoológico marino, una zona de baños y una
prolongación del paseo marítimo combinada con
parques y jardines.
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la Plaza |
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Edificio Forum |
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Centro de Convenciones |
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Parque de los
auditores |
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Puerto |
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Parque del Noroeste |
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En este sentido se ubican las críticas
de Greenpeace al proyecto Forum. Albert Rodríguez,
responsable de la campaña de aguas continentales de
España del grupo ecologista asegura: “Tendrá
un fuerte impacto sobre el espacio público marítimo
y terrestre. Su pretendida bandera de “desarrollo sostenible”
se cae de lleno al analizar el proyecto que está ubicado
en una gran plataforma litoral creada artificialmente sobre
terrenos ganados al mar”. Según Rodríguez,
las playas del noroeste de Barcelona están en desequilibrio
a causa de las fuertes pendientes submarinas que impiden la
regeneración normal de la arena. “El Forum 2004
será el responsable de que se pase de un equilibrio
precario a una situación de inestabilidad que conducirá
a su desaparición a medio plazo”.
No es el único colectivo que se opone
al Forum. La Federación de Asociaciones de Vecinos
de Barcelona (FAVB) ha decidido desligarse del proyecto porque,
según su secretario Joan García, “consideramos
que los 300 millones de euros que cuesta el Forum no se ajustan
a las necesidades de los barceloneses”. La FAVB sólo
aprueba la segunda fase de las obras prevista para después
del Forum, en la que se construirán nuevas viviendas
y se procederá a la regeneración de barrios
castigados como La Mina o La Catalana. Aunque según
García “se trata de un proyecto muy secundario
contaminado por la especulación inmobiliaria”.
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