“La libertad de prensa está en alerta roja”
Por Christianne del Olmo


“La tortura, la humillación, el asesinato de periodistas y la impunidad son moneda corriente”. Con estas palabras resumió María Dolores Massana, directora de Reporteros Sin Fronteras (RSF) en España, las conclusiones del diálogo Información, poder y ética en el que se trató de analizar la “compleja” relación entre periodismo y política. Massana añadió que “a raíz de los atentados del 11 de septiembre se ha impuesto la palabra censura, mientras que la autocensura está a la orden del día”.

La responsable de Reporteros Sin Fronteras definió al periodismo como una “profesión de alto riesgo”, en donde el reportero representa un objetivo directo. “Es una diana buscada con perversa alevosía”, dijo. “Las cámaras de televisión, los objetivos y las lentes, los micrófonos y la pluma de los reporteros, estorban. Los ejércitos no quieren testigos comprometedores”, sentenció.

Según el último informe anual de RSF, tan sólo en el 2004, 13 periodistas han perdido la vida en el ejercicio de su profesión. Irak ha sido el lugar “más mortífero”, con 23 periodistas muertos desde el inicio de la guerra.

“Se deduce que informar se paga caro, que revelar la verdad supone exponer la vida, y que para vivir en paz lo que se hace es callar”, denunció Massana “pero RSF no lo va a hacer. Exigiremos una prensa libre y no vamos a olvidar a periodistas como José Luis Cabezas, José Couso, Julio Anguita Parrado y Ricardo Ortega”, concluyó.

Por su parte, María Elena Groenemeyer, directora de la facultad de periodismo de la Universidad Católica de Chile, habló sobre la experiencia de su país, que se encuentra en un “proceso de aprendizaje en el que el periodismo, producto de 17 años de dictadura, heredó prácticas que hoy siguen viciando la relación con los poderes públicos”.

Groenemeyer reconoció que el periodismo chileno da muestras cada vez más de una mejoría. “Hoy es necesario y urgente formar reporteros responsables y comprometidos con los valores de un nuevo periodismo transparente. El periodista debe respetar al poder, pero nunca protegerlo”.

La catedrática chilena añadió que como en todo proceso de aprendizaje, se han cometido errores. “Los medios de comunicación han tendido a vanalizar y ridiculizar hasta tal punto a las instituciones y a las autoridades, que la política ha quedado reducida a un espectáculo donde termina desdibujándose la realidad”.

Antoni Bassas, director del programa ‘El matí de Catalunya Ràdio’, líder de audiencia en Catalunya, citó al escritor catalán Manuel Vázquez Montalbán, fallecido a finales del año pasado. “Cuando un periodista se enfrenta al poder, debe hacerlo con una amplia cultura de la sospecha”, parafraseó.

Según Bassas, el poder político y el periodismo operan en una misma sociedad y a un mismo nivel, pero buscan cosas diferentes. “ El periodismo busca la verdad, y el poder la acción”. El periodista barcelonés advirtió del riesgo que corren los medios de comunicación de ser manipulados por los políticos para reproducir sus mensajes. “Los medios se pueden convertir en el aparato reproductor del poder. La radio y la televisión son los micrófonos abiertos de los políticos”, dijo.

Bassas añadió a esta afirmación que “se le ha dado demasiado protagonismo a las cámaras, y los ciudadanos acaban recibiendo el mensaje por repetición, y no por entendimiento”. “Es importante ver y escuchar, pero es más importante explicar”, concluyó.