“El tamaño no lo es todo”, advirtió
Xavier Vidal-Foch, director adjunto de El País. Y lo
argumento citando a un directivo de USA Today: “Los
grandes no vencerán a los pequeños, ni los rápidos
a los lentos”. La existencia de unos pocos grupos mediáticos
no obstaculiza la supervivencia de medios locales o regionales.
“El periódico La Jota Regional vende 12.000 ejemplares
diarios. Hay sitio para todos.”, defendió Alfonso
Sánchez-Tabernero, decano de la facultad de Comunicación
de Navarra.
Ambos participaron en el diálogo ‘La concentración
de medios en España’, cuyas conclusiones se
centraron en afirmar que la solidez financiera de la empresas
periodísticas y el equilibrio entre los poderes mediáticos
y políticos son garante de una comunicación
plural e independiente.
Asís Martín de Cabiedes, de la agencia privada
Europa Press, advirtió que la única manera
de que los profesionales ejerzan su actividad con independencia
es con el respaldo de una empresa fuerte en el ámbito
económico. Sánchez Tabernero añadió
que “si comparamos la situación con Italia,
donde televisiones públicas y privadas están
controladas por el presidente del Gobierno, vivimos una
buena situación”. El catedrático, en
este sentido, puso al 11-M como ejemplo: “ese día
yo me fui a la cama tranquilo porque pude escuchar la Cadena
Ser, leer El Mundo y ver Antena 3. Todos decían cosas
distintas”.
Desde el público se puntualizó el peligro
de manipulación mediática ante la propiedad
de unos pocos sobre la información. “El señor
Jesús de Polanco se equipara al señor Botín
u otras luminarias financieras de este país. ¿Cómo
se garantiza la independencia de contenidos frente a otros
intereses en esta situación?”, planteó
un asistente. Martín de Cabiedes respondió
que “el juez supremo es el televidente o quien escucha
la radio. Pasamos un examen diario. Si el lector cree que
un medio no funciona, al final, muere. La noticia es siempre
la base ”.
Para José María Bergareche, del grupo Vocento,
“que haya grandes medios es importante, pero no se
puede acabar con las medianas empresas”. Recalcó
la necesidad de buscar un equilibrio . “PRISA factura
la quinta parte del grupo alemán Bertelsmann. España
es un país de PYMES en comunicación”.
Vidal-Folch, como directivo del Grupo Prisa aseguró
que, "en España, el tamaño de los grupos
mediáticos no es preocupante por su alta dimensión,
sino quizás por lo contrario en algunos casos"
y señaló que esta tendencia al "miniaturismo"
empresarial "puede ser sinónimo de escasa solidez
financiera", lo cual le resta "independencia"
al medio y puede provocar su "absorción"
por parte de las empresas grandes.
El representante del grupo Vocento justificó las
fusiones como una opción de "independencia económica"
de los medios ante los poderes políticos y financieros.
Guste o no, “la concentración en estos tiempos
de globalización es inevitable”, sentenció
Bergareche.