En el Zoo de Barcelona, el recién creado -al menos en términos de historia política- partido Ciutadans celebró su acto central de campaña. Una enorme carpa blanca y verde congregó a más de trescientos militantes que demostraron simpatía hacia los discursos de las principales personalidades de este nuevo partido.

La espera del evento era amenizada por una banda de jazz que no paró de tocar hasta que comenzó el acto, media hora más tarde de lo establecido. La carpa estaba adornada con macetas de flores, modernas lámparas cubiertas de gasa y grandes bolas de globos blancos y naranjas que evocaban los colores del partido. A la izquierda de la entrada estaba la tienda, donde vendían camisetas, abanicos o lapiceros a los simpatizantes dispuestos a comprar productos con el emblema de Ciutadans.

El acto comenzó con la entrada triunfal del presidente del partido, Albert Rivera y de la candidata al Ayuntamiento de Barcelona, Esperanza García. Entraron ambos acompañados por los aplausos y gritos de apoyo de los militantes. Se sentaron en primera fila y "fingieron" mantener una agradable conversación mientras eran inmortalizados por las cámaras.

Los militantes, vestidos con su mejor traje, no paraban de lanzar gritos de apoyo a sus políticos. Los primeros en subir al estrado fueron Antonio Robles y Pepe Domingo, diputados en el Parlament, junto con Albert Rivera, desde las últimas elecciones autonómicas. El castellano presidía este mitin ante el enfado de un simpatizante que advirtió en múltiples ocasiones que eran bilingües. Este mismo señor, sabiendo que el siguiente en actuar era Francesc de Carreras, se acercó a éste y le pidió que hablase en catalán.

El Catedrático de Derecho Constitucional y creador de la asociación Ciutadans dio su charla en catalán. Este hecho fue alabado con aplausos en la sala. La creación de un partido no nacionalista en el País Vasco fue la noticia más importante del mitin, que recordarían todos los ponentes que subiesen al estrado.

El humor irónico estuvo a cargo de Arcadi Espada, cofundador de la asociación Ciutadans, que arremetió con agrio ingenio contra el resto de los partidos.

Esperanza García y Albert Rivera pidieron fervientemente el voto de los ciudadanos. Ambos pusieron punto final a su discurso con el emblema: "Adelante ciudadanos". Todo terminó con el himno del partido coreado por todo el público y por los integrantes del partido, que desde el estrado apoyaban con sus palmas el cántico.